Jonás Zamudio tiene 18 años y pelea por su vida en el Hospital de Urgencias de la Ciudad de Córdoba luego de que tres delincuentes le dieran un tiro en el pecho para intentar robarle el celular: la bala ingresó por la zona izquierda del tóraz y quedó alojada detrás del corazón por lo que debieron operarlo.
Los médicos le informaron a la familia que las primeras 48 horas son clave. Por el momento, el adolescente se encuentra en estado crítico pero estable, y su pronóstico es reservado.
Noelia Arancibia, mamá de la víctima, contó en Canal 12 de Córdoba que su hijo volvía de acompañar a otro amigo del gimnasio cuando fue abordado por los ladrones que se trasladaban en una moto blanca. “La bala le rozó el corazón. Quedó alojada ahí y lo tuvieron que operar en una cirugía a corazón abierto”, explicó la mujer.
El ataque contra Jonás ocurrió el martes al atardecer, luego de que el chico regresó de trabajar, se cambió y se fue al gimnasio. Al regresar, y dejar a su amigo en su casa, Jonás continuó solo y ahí fue cuando fue abordado por tres delincuentes en moto en la manzana 40 del barrio Eco Tierra de la capital cordobesa.
Los ladrones quisieron sustraerle el celular, pero el adolescente intentó escapar corriendo y cayó. En ese contexto, recibió el disparo en el pecho. Los delincuentes huyeron sin robarle nada. Según informó ElDoce, hubo testigos del hecho que refirieron haber escuchado dos disparos.
Fue un vecino el que encontró al adolescente herido. Contó a los familiares que el chico balbuceaba que lo habían atacado tres en una moto. De inmediato, Jonás fue trasladado consciente al Hospital de Urgencias, donde los médicos detectaron que tenía un proyectil alojado detrás del corazón, por lo que se decidió la intervención quirúrgica de inmediato.
Desde el hospital informaron que el adolescente superó la cirugía a corazón abierto y se recupera favorablemente. “Anoche me dejaron entrar a verlo y estaba bien, estable”, amplió la madre de Jonás en diálogo con TN esta tarde.
Luego, la mujer recordó que el ataque a su hijo ocurrió a dos cuadras de su casa y que el adolescente tenía el celular y la billetera. “No le llegaron a robar, le tiraron a matar”, había dicho Noelia a los medios cordobeses.
La madre de Jonás detalló que el balazo no “afectó ningún otro órgano” y que los médicos le dijeron que deben “esperar 48 horas”.
En tanto, el director del Hospital de Urgencias, Mariano Marino, contó que Jonás “tenía una pequeña herida cardíaca que fue reparada”. También dijo que quedó internado en “en el área de cuidados intensivos con asistencia respiratoria”.
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